El rotundo éxito de crítica y usuarios The Spirit Engine, un RPG por turnos al estilo consolero, animó a su autor, Mark Pay, a realizar una secuela, ya comercial, multiplicando todos los aspectos del juego original, como sus detallados gráficos «pixel art» o las músicas que por si solas ya vale la pena escuchar.
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Fusionar dos estilos de juegos en uno, no es algo que funcione siempre, pero en casos como este juego en Flash llamado «Tuper Tario Tros», uno se maravilla de ver lo jugable que puede ser un cóctel entre Tetris y Super Mario Bros.
¿Que como se juega?, pues es más simple de lo que parece (lo que no quiere decir que sea fácil). Empezamos el juego como si de un clon de SM se tratara (aunque con gráficos muy pequeños), hasta que llegamos a un punto en el que no podemos avanzar más, ni saltando desde los bordes, ahí un mensaje nos indica que pulsemos espacio para cambiar el tipo de juego.
A principios de año, os hablé de un juego bastante curioso y divertido, que homenajeaba al clásico Piftall, pero con mejores gráficos y más animaciones. Ayer, el autor Aloan Moreira, me dejó un mensaje de que el juego por fin está completado, y que es freeware (por lo visto intentó venderlo como shareware, pero no le salió nada bien la aventura).
Los gráficos han cambiado bastante (a mejor), se han solucionado algunos bugs de programación, tiene tres niveles más (que suman un total de siete) y el personaje ya no se parece tanto a Piftall de pinta.
Por si no os acordáis de la pinta, podéis consultar el artículo original, o ver estas pantallas.
Los «PCeros» más ancestrales recordarán un juegazo de coches de la gente de Remedy Entertainment publicado por Apogee, llamado Death Rally, que mezclaba curiosos efectos en 3D en las pistas con el diseño y diversión típica de los juegos de conducción cenital de principios de los 90.
Era 1996 y las empresas que usaban el modelo «shareware», apenas programaban juegos exclusivos para Windows, y Death Rally no es la excepción. Por ello, los que quisieron jugar con su copia en DOS, tuvieron que acudir a «remedios» como DOSBox, que no siempre funciona lo bien que uno quisiera.
Una buena costumbre que antes tenia con el blog, y que últimamente por falta de tiempo, se me está haciendo casi imposible seguir, era la de recomendaros buenos juegos gratis.
Aprovechando que he estado sin Internet desde el miércoles pasado hasta ayer lunes, he pegado un repasón a mi carpeta «Downloads» del Disco Duro, para ver los cientos de megas de juegos que tengo descargados, y aunque no he terminado con todos, si que he visto bastantes.
