Trojan, la conversión perdida

Antes de que el poderoso conglomerado Ocean/U.S. Gold comprara las licencias de casi todas las recreativas famosas de los 80, pequeñas compañías como Elite, osaban ser licenciatarios oficiales de compañías del renombre de Capcom, con conversiones por lo general mucho mejores que las de U.S. Gold.

Uno de los últimos juegos convertidos por Elite, fue Trojan, ese beat ´em up pos-apocalíptico que tanto les gustó a los señores de Topo, tanto que lo copiaron casi todo, cambiando el mapeado y algunas cosas más de la jugabilidad y les salió ese fenomenal «Metropolis«.

Hace unos días, por una de esas casualidades de la vida, Clive Townsend, al que ya debemos el «rescate» del juego de Durell Death Pit, encontró en unos discos unas cuantas versiones beta, de la conversión que Durell estaba realizando para Elite de la recreativa de Capcom.

Si os pensáis que vais a poder probar esta más que decente conversión en vuestros Spectrums y/o emuladores, siento desilusionaros, ya que por muchas ganas que el buen Clive tenga de compartir este hallazgo, por culpa de los hijos de su madre sres. de Capcom, que prohíben la distribución de cualquiera de sus conversiones, nos quedaremos sin probar esta joya.
Por lo menos, el programador ha tenido el detallazo de subir unos vídeos a YouTube, en los que podemos apreciar el estado del proyecto, en varias versiones, la verdad es que no pintaba mal (atención a la música de Rob Hubbard), y desde luego estaba mucho más avanzado que la versión de C64, de la que sólo se ha rescatado una «scrolling demo» del decorado de la primera fase.
Disfrutad de los vídeos, que ¡menos da una piedra!.



3 comentarios sobre “Trojan, la conversión perdida”

  1. Una pena que no podamos tener una copia del juego por culpita de los japoneses 😈 😛 , pero ya con estos videos uno se hace a la idea. Qué menos, qué monix… 🙂

  2. ¿Que el autor tiene miedo a que Capcom le denuncie por publicar dos versiones incompletas de una conversión programada por él que nunca llegó a salir a la venta?

    ¿Y no sería posible que un anónimo las publicase en un foro diciendo que las encontró en el mercadillo? ¿O que apareciesen mágicamente dentro del FTP del World of Spectrum o similar, sin rastro de quien las dejó ahí?

    Hay que tener un poco de picardía…

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